Post de David Sierra.
Ilustraciones de Víctor García Blay.
Dependiendo del modelo, la mayor parte de los aviones comerciales utilizados actualmente son capaces de transportar más de 200 pasajeros en cada trayecto, por lo que están compuestos por conjuntos piezas de grandes dimensiones, como por ejemplo las alas.
Cada conjunto de piezas que componen el avión son normalmente producidas en diferentes fábricas, para luego realizar el ensamblaje final en lo que se conoce como la línea final de ensamblaje o FAL (por sus siglas en inglés: Final Assembly Line). Por lo tanto, cada conjunto debe ser transportado de su fábrica de producción a la llamada FAL.
El transporte de dichos conjuntos de piezas se lleva a cabo tanto por tierra, como por mar o aire. Sin embargo, el transporte aéreo es el método primario utilizado para las grandes piezas. El problema es que los aviones de carga convencionales no son lo suficientemente grandes para poder transportar piezas de tales dimensiones, por lo que los fabricantes han diseñado aviones específicos capaces de transportas estas piezas.
Dentro de esta categoría de aviones hay un modelo que destaca por encima del resto por dos razones: posee el compartimento de carga más grande de todos los aviones cargueros del mundo, y estéticamente tiene un gran parecido al cetáceo conocido como beluga.
Este gigante de los cielos tiene un compartimento de carga de 63 metros de largo por 8 metros de ancho, es decir, podría alojar a casi 2500 personas de pie una al lado de la otra, y mide 19 metros desde el suelo a la parte más alta del avión. Es tan alto como un edificio de tres plantas.
Con respecto al peso que puede cargar, es capaz de transportar un máximo de 51000 kilos, que es el equivalente a casi 9 elefantes africanos, pudiendo recorrer con tal peso alojado en su compartimento de carga una distancia de 4000 kilómetros sin recargar sus depósitos. En otras palabras, es capaz de transportar tal peso desde Madrid al Círculo Polar Ártico sin necesidad de repostar.
Por último, otro dato interesante sobre este avión es la manera en la que está construido. En concreto, este modelo está fabricado a partir de un avión comercial donde la parte central del fuselaje se corta y elimina para instalar el gran compartimento de carga que dota a este avión de las características descritas anteriormente. La instalación de dicho compartimento de carga es llevada a cabo en un periodo de aproximadamente tres meses, utilizando unas 8000 piezas para hacer posible la unión entre este y el fuselaje existente.
Este tipo de aviones de carga hace posible cubrir la demanda de aviones comerciales en tiempo y cantidad de producción, lo que no sería posible por carretera debido a las dimensiones y la localización de las diferentes fábricas, o por mar debido al tiempo de trayecto.